Por EFE . 7 de Junio de 2022 – 10:30 HS El Economista
Palabras claves: Guatemala; Banco Interamericano de Desarrollo (BID); hidroeléctricas; comunidades Indígenas; consulta.
Varias organizaciones no gubernamentales guatemaltecas expresaron su satisfacción por el retiro del financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a dos hidroeléctricas ubicadas en el noroeste del territorio.
Las hidroeléctricas funcionaban en el departamento (provincia) de Huehuetenango, situadas unos 300 kilómetros al noroeste de Ciudad de Guatemala, y perdieron el financiamiento del BID desde 2021, según confirmaron las organizaciones en rueda de prensa.
La decisión de retirar el financiamiento por parte del Banco Interamericano de Desarrollo obedece a un informe interno de la misma entidad divulgado en septiembre de 2021, tras investigar la manera en que ambas hidroeléctricas se instalaron en Huehuetenango.
Las hidroeléctricas son San Mateo y San Andrés, ambas pertenecientes a la compañía privada Energía y Renovación S. A. y ubicadas en el municipio de San Mateo Ixtatán ,en Huehuetenango, desde su construcción en 2013.
La colombiana Rosa Peña, representante de la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (Aida), dijo durante la rueda de prensa este lunes, en el centro de la Ciudad de Guatemala, que la decisión producida por el informe interno “es un reconocimiento” para las denuncias de las comunidades aledañas sobre las hidroeléctricas.
Peña detalló que la entidad que representa, junto a las organizaciones Plataforma Internacional contra la Impunidad y Gobierno Ancestral Plurinacional de las Naciones Originarias Akateko, Chuj, Popti’, Q’anjob’al, han “venido acompañando” a las comunidades indígenas aledañas en la denuncia contra las hidroeléctricas, planteada oficialmente ante el BID en 2018.
De acuerdo con Peña, el informe interno de la misma entidad y sus recomendaciones “deben servir al grupo BID para aprender lecciones y contribuir a la no repetición de los errores del pasado y que dieron origen a la queja”.
El financiamiento a las hidroeléctricas por parte del Banco Interamericano de Desarrollo fue de 13 millones de dólares y será cancelado debido a que el informe interno señala que se violaron normas de la misma entidad económica regional.
“Lo que nosotros estamos resaltando en este caso es que es el mismo banco el que está reconociendo que ha incurrido en faltas a sus propias normas”, añadió Rigoberto Juárez durante la rueda de prensa, en representación del Gobierno Ancestral Plurinacional de las Naciones Originarias Akateko, Chuj, Popti’, Q’anjob’al.
Las denuncias de las comunidades indígenas aledañas a las hidroeléctricas empezaron desde antes de la instalación de las hidroeléctricas, por falta de consulta popular, y continuaron por el abuso en los recursos naturales, especialmente en dos ríos locales, lo que a su vez se tradujo en violencia contra los pobladores, según medios locales.